Aún no es tarde para el cambio.
Los millones de euros en subsidios a la industria fósil en la UE, podrían ser usados
para la descarbonización y la transformación de nuestras economías ayudando también a
mejorar la vida de las personas de muchas maneras.
Entre 2015 y 2017, más de 40 países dieron pasos en este sentido,
como
Marruecos,
Filipinas
o Indonesia, desviando el dinero
de estos subsidios para mejorar la vida de las clases más empobrecidas.
En España los últimos 4 años del gobierno de coalición (el "más progresista de la historia")
nos muestra que nuestros gobiernos no miran por el bien común y no emprenden los
cambios estructurales que necesitamos con tanta urgencia. Esto contrasta con las múltiples
experiencias de asambleas ciudadanas climáticas en los
3 últimos años,
donde las personas informadas por la ciencia de manera independiente toman resoluciones a favor de
políticas públicas de suficiencia y de reducción drástica del consumo de bienes, de materias
primas o de energía.
La participación ciudadana refuerza la democracia representativa
porque permite emanciparse de la influencia de los grupos de intereses y garantiza que el
pueblo tenga realmente derecho a decidir sobre su futuro. El
último informe del IPCC
recomendó una “mayor participación pública en los procesos de política climática y
gobernanza” porque
“permite una transformación social más amplia hacia el cambio
sistémico, incluso en contextos complejos, dinámicos y controvertidos”.
…Y que son capaces de emprender la transformación profunda del sistema que
necesitamos. En España por ejemplo, la
Asamblea Ciudadana por el Clima
que se celebró entre 2021 y 2022 acordó con porcentajes de apoyo superiores al 90% medidas como:
- Una mayor frecuencia, conectividad, simplificación y abaratamiento del transporte
público.
- La promoción del autoconsumo y el desarrollo de comunidades energéticas.
- La regulación de precios e impuestos energéticos.
- La implantación de medidas que impulsaran una transición agroecológica.
Pero para que las resoluciones de las asambleas ciudadanas no caigan en saco roto y se
apliquen de verdad,
estas deben de ser permanentes y vinculantes
tanto a nivel europeo como nacional y autonómico. Además también deben incluir a todas las
personas que residen en el territorio, independientemente de su situación legal.
El tiempo se nos agota y solo a través de la movilización social y la desobediencia
civil podremos conseguir que se tomen medidas reales.
Si miramos al pasado podemos ver como la desobediencia civil noviolenta ha jugado un papel
vital en muchos de momentos históricos como en la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos.